Publicado por Etelvina Diversion , sábado, 23 de enero de 2010 19:12
Azucares, de placer instantaneo,
y las caidas mas amargas.
Me llevas por delante, me embestis, me borras,
y yo que me presto a perder el control.
Uno nunca se cansa de pedir,
pero yo te dije veinte veces gracias,
cansada de saborear y no poder tragar.
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