Publicado por Etelvina Diversion , lunes, 7 de diciembre de 2009 4:16
Una vez que todos acordaron en el adios,
ella se acerco, incredula, no queriendo que termine el show.
todos tenian sus caras blancas, como de duelo.
Todos tenian su pena a cuesta.
Julieta no creia en dioses, para no tener que llorar.
Junto sus cosas, y se fue,
conciente del quilombo que la esperaba,
en su ciudad natal.
Con la cabeza baja, y miedo en los ojos,
por ese puto final.
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